Mis amigos, los Texanos de Houston corrieron a su head coach Gary Kubiak, después de la derrota de ayer ante los Jaguares de Jacksonville.
El dueño del equipo, Bob McNair, anunció el despido del head coach hoy viernes por la mañana, diciendo que el desempeño del equipo no era a lo que él como dueño estaba acostumbrado ni la organización. Wade Phillips, el coordinador defensivo, será quien sirva como head coach interino el resto de la temporada.
Gary Kubiak estaba en su octava temporada como head coach de los Texanos, y termina con marca de 61 juegos ganados por 64 perdidos.
Esta temporada, los Texanos llevan marca de 2 juegos ganados por 11 perdidos.
Si me preguntan a mí, esto es una falta de respeto grandísima. Si los Texanos tenían aspiraciones a Super Bowl fue porque Kubiak se las dio. En esas 8 temporadas al frente del equipo, sólo tuvo 3 temporadas perdedoras. La temporada pasada terminó con marca de 12 juegos ganados por 4 perdidos. Recordemos que fue nombrado el Coach del Año en la NFL en el 2011, y que ganó campeonatos de división sus últimas dos temporadas.
Esta temporada la culpa no es de él. Matt Schaub tuvo un mal desempeño y Arian Foster, considerado por muchos uno de los mejores corredores de toda la liga, se lesionó y quedó fuera toda la temporada. Esta fue una temporada mala, que todos los coaches tienen una, y no se le puede echar toda la culpa a él.
Tal vez lo mejor para Kubiak sea dar por terminada su carrera, debido al problema de salud que tuvo hace unas cuantas semanas, cuando tuvo un mini infarto en el medio tiempo de un juego. Esto muestra su compromiso con el equipo, sacrificando su salud por la organización.
Se me hace una falta de respeto mayúscula el hecho de que ni siquiera lo hayan dejado terminar la temporada. Yo no sé ustedes, pero yo como entrenador de este bello deporte estoy molesto.
Sin más por el momento me despido, no sin antes desearles una excelente tarde. Le deseamos a Kubiak la mejor de las suertes en su carrera si decide continuarla.
Gracias y que Dios los bendiga.
