Muchas veces uno se deja llevar por las estadísticas sensacionalistas y se olvida de lo que realmente importa, que es el desempeño del equipo en el campo.

Jeff Fisher

Señores, pues últimamente ha habido mucho escándalo, mucho ruido, por la salida de Jeff Fisher de los Carneros de Los Angeles, y la verdad es que me estaba manteniendo un poco al margen de todo esto, pero he estado escuchando mucho algo que yo creo que sí vale la pena aclarar.

A muchos periodistas les está gustando aventar el dato de que Jeff Fisher es el coach con más derrotas empatado con un señor que se llama Dan Reeves, con 165 derrotas a lo largo de su carrera ambos. Esto lo dicen como si fuera algo muy negativo, y la gente lo está repitiendo de la misma manera, como algo negativo.

Normalmente no comento mucho de las salidas de los coaches porque siempre termino defendiéndolos. Yo lo veo desde el lado del coach, entonces es difícil comprar todo lo que los medios nos venden, todos esos «fallos», la distribución de la culpa, todo eso es difícil de comprarlo cuando conoces cómo se lleva un equipo de football americano.

Con respecto a la estadística anterior, permítanme decirles que esa estadística es totalmente inservible si no se dividen el número de derrotas entre el número de temporadas coacheadas. Si no se divide, los coaches con más número de temporadas coacheadas siempre van a tener más derrotas que los coaches con menos temporadas coacheadas.

El señor Jeff Fisher lleva coacheando 22 años seguidos en la NFL, desde 1994 que asumió el cargo de head coach interino en los Petroleros de Houston, que después se convirtieron en los Titanes de Tennessee, hasta los Carneros de Los Angeles. Ese tiempo coacheando es solo comparable al tiempo de Bill Belichick entre los coaches activos, que coacheó 5 temporadas a los Cafés de Cleveland en los 90’s, y a los Patriotas de Nueva Inglaterra desde el 2000, sumando así 23 años, uno más que nuestro compañero Jeff Fisher.

Si ahorita les preguntara, de entre los coaches activos actualmente en la NFL, ¿quién es el que tiene más número de derrotas? probablemente no tendrían una idea de quien es. Les di pistas, les acabo de decir quien es el único coach que tiene tantos años coacheando como Jeff Fisher, pero aún así probablemente estén pensando «no puede ser él». Pues sí, sí es él… Bill Belichick es el head coach con más número de derrotas entre los coaches activos de la NFL, el «coach más perdedor» entre los activos, como a los medios les gusta llamarle a Jeff Fisher.

¿Ven como esa estadística es totalmente inservible? Es ridículo que usando el mismo criterio que usamos para juzgar a Jeff Fisher, podamos decir que Bill Belichick es el «coach más perdedor» entre los coaches activos.

Mucha gente y muchos medios están pidiendo que Jeff Fisher jamás vuelva a tener una oportunidad en la NFL, apoyándose mucho en esa estadística. A ellos les pregunto ¿corremos a Bill Belichick basándonos en esa estadística también? Yo creo que la respuesta es obvia. No.

Jeff Fisher merece otra oportunidad en la NFL, a pesar de lo que muchos me puedan decir. A muchos se les olvida el equipo que Jeff Fisher tenía cuando llegó… Déjenme recordarles. Jeff Fisher llegó a un equipo que en 4 de las últimas 5 temporadas antes de su llegada, el récord había sido 3-13 o peor (3-13, 2-14, 1-15, 7-9, 2-14, del 2007 al 2011), y lo convirtió en un equipo que estaba muy cerquita de la marca .500 de manera constante (7-8-1, 7-9, 6-10 y 7-9 en sus cuatro temporadas completas con el equipo). Eso es una inmensa mejoría. ¿No creen que un coach que logró tener esa mejoría en cuanto a promedios de resultados, merezca otra oportunidad en la NFL? La respuesta también es obvia. Sí.

Ambos datos que presento son estadísticos, pero una es estadística sensacionalista «el coach con más número de derrotas», y la otra es estadística de la interesante «cómo estaba el equipo antes, y como está ahora en juegos ganados y perdidos». ¿Si ven la diferencia? Hay que tener mucho cuidado con la estadística que nos presentan, porque la mayoría de la misma es inservible la mayor parte del tiempo.

Con esto me despido, no sin antes desearles una excelente tarde.

Gracias y que dios los bendiga.